Cómo Hacer una Casa Acogedora y Confortable
Durante años uno lucha con la decoración por alcanzar cierta perfección estética. Uno puede recoger muchas imágenes de habitaciones que son grandes y encantadoras, incluyendo las que se montan en tiendas de muebles. Pero después de un tiempo sucede algo diferente, uno se empieza a sentir más y más atraído por espacios pequeños, cálidos y cómo, pero cuando uno busca cómo hacer una casa acogedora, la cosas cambian pues las casas no son solo para mirar; son para vivir. Y una casa realmente acogedora, que satisfaga bien tus necesidades e invite a los visitantes, también será hermosa.
Así que si tus metas además del embellecimiento, son acogedoras, cálidas y hogareñas, aquí hay algunas ideas sobre cómo hacer una casa acogedora que diga: “Adelante. Quédate un rato”.
1. Busca muebles que sean ‘acurrucables’
A menudo hay un poco de espacio entre los muebles que son preciosos a la vista y los muebles que son preciosos para sentarse. Idealmente, el sofá perfecto lograría un equilibrio entre los dos. Pero si está realmente dedicado a la comodidad, antes de comprar cualquier cosa diseñada para sentarse, debe tener en cuenta su capacidad de “acurrucamiento”. “¿Me puedo ver acurrucado en este sofá de un domingo por la tarde, con los pies hundidos en los cojines, leyendo un libro y tomando té?” Si la respuesta es no, sigue buscando.
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2. Mezclar un poco
“No compre todos sus muebles en una tienda”, dice el viejo adagio, “a menos que quiera que su casa se vea como una tienda de muebles”. Las tiendas de muebles son encantadoras, pero no son atractivas. Para alejarse del aspecto de la casa de espectáculos, mezcle piezas de diferentes estilos. Al considerar las cosas juntos, piense menos en lo que “coincide” y más en lo que “va”. La mezcla de piezas diferentes crea una textura visual, lo que hará que cualquier espacio sea más acogedor y más acogedor.
3. Llena tu casa con cosas que quieras tocar
Una silla de cuero viejo, una mesa de madera desgastada, un tiro mullido, una alfombra estampada, elementos con mucha textura, que son interesantes de tocar y sostener, agregan calidez a la habitación.
4. Usa colores cálidos
Hasta que empecé con mejoras serias en el hogar y me convertí en un estudiante de las virutas de pintura en Lowe’s, no se me ocurrió que cada color tuviera un “estado de ánimo”. Los colores más fríos hacen que un espacio se sienta más grande y más aireado. Los colores cálidos son la mejor opción: hacen que un espacio se sienta más pequeño y acogedor. Todos los colores, incluso los blancos y los negros, pueden tener matices fríos o cálidos.
5. Iluminación, iluminación, iluminación
Uno de los factores más importantes en la apariencia de una habitación es algo que la mayoría de la gente generalmente no piensa: la luz. A veces me encuentro babeando sobre una bella imagen en una revista, solo para darme cuenta: “No me gustan las cosas en esta habitación. Me gusta la luz “. Es especialmente importante en una sala de estar tener múltiples fuentes de luz: más brillantes para reuniones más grandes, más pequeñas para reuniones más íntimas o una noche adentro. Las lámparas de mesa llevan la iluminación a un nivel humano y le dan a las habitaciones grandes un sentido de escala.
6. Cambia los focos de luz fría por cálida
Pequeña inversión, trabajo mínimo, cozificación casi instantánea.
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7. Vive con las cosas que amas
Tu colección de libros. El viejo teléfono de rosca de la casa de tu abuela. La matrícula de tu primer coche. Todas estas cosas hacen que tu casa se sienta como en casa porque te recuerdan a las personas y las cosas que amas. Y cuando estás en casa, sientes que es un lugar al que realmente pertenezco. Y esa es toda la idea de la comodidad, que las habitaciones están hechas para las personas, para ti.
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